
Estoy jodido troncos, hasta ayer tenía la sanísima costumbre de leerme 20, 30 o 40 páginas cada dia de
"Por favor mátame: La historia oral del punk", y ayer por desgracia llegó a su fin. Nunca me había sabido tan mal acabarme un libro, habitualmente cuando veo que se acerca el final pienso en el siguiente, pero en este caso todo lo que se me ha ocurrido me sabe a poco.
"Por favor mátame" está escrito por Legs McNeil, superviviente de la escena punk, y su tarea ha sido recopilar los testimonios de más de un centenar de protagonistas que vivieron en sus propias carnes (y en sus propias venas) el nacimiento, desarrollo y decadencia del punk. El resultado es el punk narrado por sus propios protagonistas, quien mejor que ellos para relatar lo que pasó y quien mejor que ellos para distorsionarlo y hacer todavía más grande su leyenda.
Iggy no se encuentra venas para picarse, Lou Reed ofrece que se caguen en su boca, Johnny Thunders ázul por la heroina y con toda clase de bultos, Dee Dee y sus historias de la 53 & 3rd, Malcolm McLaren intentando sacar tajada, Jim Morrison no se despega de la barra ni para mear, Wayne Kramer y sus movidas en la cárcel, el macarra de Handsome Dick Manitoba y sus tanganas, Sid Vicious muerto de sobredosis la noche que salía de la cárcel, y un alargadísimo etcétera de historias de groupies, yonkis y kamikazes (punks y no tan punks). Este libro es demasiado grande como para que se escape de las manos de cualquier fan de los personajes citados anteriormente.
No me puedo imaginar un libro sobre la historia del punk, especialmente de la escena neoyorquina, más completo, más fascinante y en el que el número de frases lapidarias por metro cuadrado sea más alta. De todos modos, si sabeis de alguno decírmelo porque con el mono que llevo podría dejar a Johnny Thunders a la altura de un straight-edge. No creo que sea la emoción, desde el primer párrafo (o desde que leí sobre su traducción al castellano en la Ruta 66) sabía que este libro se iba a convertir en uno de mis favoritos, y ahora que ya me he pulido las más de 500 páginas veo que no me he equivocado.
Podría acabarme "Viaje al fin de la noche", también empecé una biografía de Elvis que también me tiene bastante alucinado, pero ahora mismo no creo que pueda a volver leer algo tan acojonante como Iggy diciendo "en aquella época, mis criterios eran diferentes a los de los demás. Quería que la música saliera de los altavoces y te agarrara por el cuello, te aplastase la cabeza contra la pared y te matara".